Soy “open minded” o al menos eso me gusta pensar,
pero en lo que se refiere a la vida amorosa, al proceso de “encontrar” pareja específicamente
tiendo a ser conservadora.
La “búsqueda” o la admisión de esta tendía a
parecerme contraria a mis concepciones feministas y, para rematar, a mis ideas románticas
(y literarias) del amor. El destino, los astros, el amor a primera vista, y
vaya Ud. a saber qué otra cosa me tenía en ese papel pasivo de: sucederá y no
tengo que preocuparme o sino sucede igual estaré feliz.
No dudo de que haya felicidad sin pareja, pero
por un momento de reflexión (estamos en cuarentena… hello) llegué a la conclusión
de que un aspecto fundamental de la vida se lo estaba dejando al azar, a la
suerte y a otros, un “otro” desconocido… ¿haría esto con mi carrera?, vamos… ni
siquiera lo haría con mi cabello!
Así que aquí estoy, por primera vez, sincerándome
y tomando responsabilidad de que si quiero una pareja de vida (como creo que la
quiero) no me va a tocar la puerta (aparte que… being honest… no le abriría a ningún
desconocido la puerta).
La intención de esta bitácora no la tengo clara…
solo quiero compartir lo que me pasa por la mente (que es mucho) y lo particular que encuentro todo esto… para mi es una experiencia nueva y capaz el compartirla me hace
sentir menos vértigo.
¿Ustedes ya han incursionado en esto? ¿Algún “primer”
consejo?
